A dos meses de haber iniciado sus estudios en gastronomía, los jóvenes becados por la Alcaldía de Medellín, bajo el Convenio 11 de Sapiencia con la Universidad Colegio Mayor de Antioquía de la zona Occidente, manifiestan que las metas son como las flores y están tiene colores.
Algunos de los estudiantes que asisten a clases a la Institución Educativa Benedikta Zur Nieden, en San Javier, bajo este programa de becados, son recién egresados del bachillerato, otros hace unos años y algunos anhelaron por años estudiar una carrera universitaria, que además de cumplir sus sueños, les permitiera tener un ingreso, porque, ante la ausencia de estos, no habían podido acceder a los estudios.
Para la gran mayoría estar becados implica dos cosas, entregarlo todo para no perderla y dar todo de ellos para ser los mejores y hacer realidad su gran sueño profesional.
Es así, como este grupo de hombres y mujeres de diversas edades, se les ve llegar media hora antes del ingreso a sus clases y reunirse a las afueras de la Institución educativa o en la biblioteca cercana a revisar y compartir los conocimientos a aplicar en las clases de ese día o preparan sus exposiciones.
De igual manera, a diario, esperan con anhelo, no solo la llegada de sus clases y los docentes, sino algún representante del proyecto desde el Colmayor, para, además de seguir preguntando y despejar sus inquietudes sobre su gran sueño, manifestarles lo felices que están al ser becados.